25 de febrero de 2009

Los Itinerarios vitales

Los que viven en la pista de los payasos hace tiempo que abandonaron los itinerarios vitales de los que viven en la gran pista central. Los olvidaron, los enterraron en el mayor de los olvidos. De ahí nace su poder sobre la gran pista central. En ésta, los que allí nos movemos, estamos siempre pendiente de no perder el equilibrio y caernos o de no morir al intentar hacer un triple mortal. La vida del funambulista y del trapecista es siempre más difícil que la del clown. Pero son esos duros itinerarios vitales los que marcan nuestro carácter, los que dejan huella en nuestra existencia. 
El problema surge cuando los payasos amnésicos entronizan sus nuevos caminos como los únicos caminos posibles y obligan a todos los demás que vayamos por ellos. Pero la dificultad está en que mientras  ellos lo transitan por despejadas autopistas los demás tenemos que hacerlos por el alambre.
Ellos hace tiempo que dejaron de salir a comprar el pan o el pescado a precios prohibitivos al mercado, hace tiempo que no ven el mundo a la altura de un chico joven en vaqueros y zapatillas que no quiere estudiar porque está harto de ver que no sirve para nada; hace tiempo que dejó de preocuparles que el hijo que trabaja en una contrata de Acerinox se quede en la calle; ya ni se percatan de que la subida del catastro dejará a muchas familias al borde de la quiebra; hace tiempo que ni se enteran de que en las barriadas la convivencia interétnica está cada vez más difícil y han dejado de temer que sus hijas tenga un novio que las trate como si fuera una marioneta; hace tiempo que no tienen que ir a que le receten paracetamol para el dolor de espalda a un edificio viejo, con salas pequeñas, oscuras y sin ventilación con tropecientas personas más; hace más tiempo aún que no tienen que ir al INEM o al Ayuntamiento a arreglar documentos y después de hacer una cola interminable un funcionario malencarado lo trate con la punta del pie. 
Y sin embargo no paran de decirnos todos los días como tenemos que hacer las cosas; ellos que exijen ser tratados de señor don fulano de copas, ellos que han dejado de moverse por donde nos movemos, que han dejado de vivir en nuestras calles, plazas y parques, en nuestras escuelas y hospitales; ellos que ya viven en sus barrios blindados y seguros; los mismos que ya no mandan a sus hijos a colegios públicos, ni cojen el bus chatarra al centro, ni cuando se ponen malos van al centro de salud del seguro; ellos con su gran poder adquisitivo que les da para comer y vestir bien, que les da para una atención sanitaria de calidad, sin colas ni masificación, ni tampoco esperas; ellos que tienen defensa jurídica de primera mano, a modo de inexpugnable coraza que los protege de todos nosotros; ellos que solo se relacionan en lugares exclusivos y entre personas de tres o cuatro apellidos. 
Los mismos que hablan de apertura, de solidaridad, de progreso, de mezcla; los mismos que te acusan de racismo o xenofobia; son los mismos que no pasan por eso, pero quieren que nosotros, los que sí pasamos por eso lo hagamos de otro modo. Se equivocan porque  se esfuerzan por olvidar. No se esfuerzan por comprender desde su nuevo lugar lo que pasa en el lugar donde estaban antes. 
Pero si te paras a pensarlo somos los demás los que los hemos colocado en ese lugar, al darles nuestro voto, al comprales su libro, al escucharlos en su tertulia en la radio o en la tele, al consumir de modo inmisericorde. A lo mejor es que nos hemos olvidado que existen y que nos manipulan. Y que deberíamos tomar conciencia de ello, de que la ciudadanía ocupa el lugar más importante de la realidad, de que la pista central, la nuestra, tiene que cambiar a mejor, pero desde dentro, no ser modificada por los payasos amnésicos. Que cada vez que votamos a un político que dice que es el mejor y hará que las cosas cambien, cada vez que leamos o escuchamos a uno de estos opinólogos expertos o tertulianos salvapatrias que solo saben acusar a otros de demagogos, o cada vez que compramos algo que hace muy rico a otro alguien que no es uno mismo a costa de alguien del tercer mundo; no les dejemos que nos manipulen más. En nuestras manos está nuestro destino, hay que quitárselo de sus garras.

22 de febrero de 2009

El Gran Circo de las Tres Pistas

El día a día de la sociedad, la realidad cotidiana que todos vivimos, esto es, la convivencia en las calles, el trabajo, el hogar y la familia; son la gran pista central de nuestro maravilloso circo: la pista de los funambulistas. En ella ocurren a la vez infinidad de cosas: el tráfago constante de seres y estares, el ruido incesante de la navegación por callejones y escaleras, los choques que hacen saltar chispas, las disensiones que fracturan los cantos de las cosas dejando a su paso innumerables esquirlas, los llantos gozosos y las risas melancólicas; la lluvia y el granizo, el sol abrasador, la marejada más obtusa y el estruendo que los obuses emocionales producen a nuestro alrededor, también la mezcla de sangres, credos y colores. Pero pegada a esta gran pista existen otras dos, una a cada lado.
Por una de ellas transita lo peor de nuestro circo: la pista de las fieras. En ella encontramos el odio de los bajos fondos, el tráfico de los muchos tipos de muerte, el poderoso caballero Don dinero con elegante chaqueta y corbata y lujoso maletín de abogado, es una lugar sumergido en tinieblas y lamentos. Es ese lugar al que todos le negamos su existencia. Donde no queremos mirar, donde no queremos estar. Pero es ese lugar que nos afirma la existencia a todos nosotros porque sin nosotros él no sería. Y esta pista es la que más a se aferra a la vida. En esta pista se mata por existir.
Por la otra transitan los privilegiados del circo: la pista de los payasos. Aquellos que un día vivieron en la central o menudearon por la oscura. Viven aquellos que en su día vestían de pana raída y ahora lucen sus mejores galas y mandan a sus hijos a estudiar a Universidades caras. Es la pista del olvido y de la desmemoria. Ese es, quizás, el único requisito para poder pasar a ella, para poder habitar y vivir plenamente en su interior. El privilegio no lo da el dinero. Ese privilegio, ese poder, lo otorga el olvido del que olvida su pasado en las otras dos pistas. No recordar nada de lo que viviste ni de lo que sentiste en aquellas callejuelas oscuras y tétricas o en aquellos lupanares; en aquellos colegios públicos, en aquellas atestadas salas de espera de Urgencias en época de gripe, en aquellas largas y aburridas colas en la oficina del desempleo. Olvidan el hambre y la miseria y olvidan la alegría de las comidas en familia; olvidan lo que es viajar en un autobús atestado o que tu hija de 15 años decida liarse con un extranjero; olvidan lo difícil que es convivir y llegar sano y salvo a fin de mes. 
A los que viven en esa pista les parece que el mundo termina en el borde y que más allá no hay nada más. Olvidaron que hay otros lugares y otras personas, olvidaron que hay lugares donde no se olvida, que hay lugares donde lo único que se tiene es la memoria y el recuerdo, porque son la memoria y el recuerdo lo que te mantiene vivo y luchando por sobrevivir. Ese olvido los convierten en lenguarazes irresponsables y en salvapatrias insensibles y en manipuladores maniqueos, en definidores exactos de lo absurdo, en proclamadores de lo que está bien o mal, o en descubridores de lo que es progreso y de lo que es retroceso. 
El circo y sus pistas, nuestra realidad compleja y diversa.

21 de febrero de 2009

¡Y ahora qué...!

Es esta paupérima y asquerosa política, con forma de aberrante partida de ajedrez, en la que vivimos, hay una máxima que no para de cumplirse, y que ninguno de los contendientes es capaz de aprender, cegados como están por los atávicos odios que los mueven: si le pegas una puñalada al otro, antes o después el que te la pegó te la pegará a ti.
Hace unos años hubo un estruendoso clamor en la ciudadanía contra el gobierno y su decisión de mandar tropas a Irak, e involucrar a España en una guerra injusta e ilegal. El ahora partido del gobierno, antes en la oposición, utilizó aquel acto de dignidad social en su beneficio, lo que le dio importantes réditos electorales.
Ahora, de nuevo, asistimos a un gran clamor social para el endurecimiento de las penas por delitos graves, a raíz de lo sucedido en Sevilla. Y nada me hace dudar de que el partido en la oposición, otrora en el gobierno, lo utilizará contra el partido del gobierno.
Alguien dirá que no son cosas iguales, o que entonces fueron manifestaciones multitudinarias y ahora no tanto. Onanismo puro les respondo. 
¿Qué ocurre? ¿Ahora no vale de nada el clamor popular y sí valía entonces? ¿Sí valía porque le venía bien a los tigres y mal a los leones, y ahora como le viene mal a los trigres no puede valerle a los leones? Ahora no y antes sí; se manipula siempre o nunca, o solo cuando interesa. ¿Qué tiene más valor lo que dicen las urnas o lo que se dice en la calle? ¿Aquella vez fue lo que se dijo en la calle y ahora lo que se diga en las urnas? Cuando toca dar puñaladas están contentos pero ponen cara de sufrientes cuando toca recibirlas.
¡Qué desgracia de clase política tenemos!

20 de febrero de 2009

El debate abierto

Hay un debate abierto de considerable magnitud y calado a cuenta de las penas que habrán de recibir los asesinos de Marta. Los políticos son muy reacios a entrar en debates que no generan ellos mismos o sus periodicos afines. No hay más que mirar lo que hay liado con lo de la Corrupción en Madrid, todo lo que se habla y se escribe y la poca atención que le han prestado al asunto de esta chiquita. A los políticos y sus periodistas de cabecera les gusta revolcarse en la mierda, no salir al mundo de la realidad a ver que pasa. Para ellos lo de Marta entra en la categoría de sucesos; en la importante y excelsa categoría política entra lo de la cacería y el espionaje.
Se pide un endurecimiento de las penas e incluso cadena perpetua para este tipo de delitos. También cambios sustanciales en la ley del menor. Los políticos a lo suyo, poner buena cara para salir bien en la foto. Lo importante es el cabroncete del cazador ministerial furtivo o el presidente valenciano ratero. Y mientras, la ciudadanía jodida hasta las trancas: frustrada por la impotencia de lo sucedido, por el ninguneo de sus representantes y por las debilidades de un sistema judicial lento y perverso. Centrémonos.
1º- Las penas han de cumplirse íntegramente. No tengo claro lo de la cadena perpetua, reconozco que es un debate que tengo abierto conmigo mismo. Es cierto que en otras partes del mundo existe y amanece todos los días; y en otras partes se aplica pero la criminalidad no desciende. Lo que sí tengo claro es que hay que reformar el Régimen Penitenciario. Si te caen 40 años, son 40 años, ni más ni menos. Y eliminar, desde luego, toda las exenciones y todas las comodidades. Cuando se condena se condena, no se le manda al tipo a una especie de campamento de verano en el que si estudias en la UNED o haces ganchillo a la luz de la luna se le quitan días de condena; o que pueda salir de paseo y tener todo tipo de lujo y comodidades en las celdas o que puedan salir a dormir los fines de semana. La justicia ha de tener la sutiliza de la seda, para detectar los matices de los delitos (no todos los crímenes son iguales) las idiosincracias de las personas (no todos los individuos son iguales) y las posibilidades del futuro (hay crímenes y personas que sí pueden tener solución y reinserción otros no), y a la vez ser contundente como un martillo pilón. Esto nos lleva a...
Las víctimas antes que el reo. Este es el punto de partido innegociable de un Estado que se considere de Derecho. Es inaceptable que la reinsercción del preso esté antes que el derecho de justicia de las víctimas. INADMISIBLE. Las víctimas han de ser lo primero. En este caso Marta está muerta y su familia destrozada. Esto es lo primero, y casi lo único. No hay que apelar ni a la Pena de Muerte ni a cárceles de corte cinematográfico (ej Cadena Perpetua o Tranvía de Medianoche). Hay que darle lo que el preso no dio a su víctima: dignidad. Pero sólo eso, ni una ventaja más, ni un premio más, especialmente en estos delitos graves de sangre o de terrorismo. Y en los de índole monetaria, que no salga de la cárcel hasta que no devuelva lo que robo. así de claro y rotundo: si se demuestra que robaste x, vivirás en la carcel hasta que no devuelvas ese x. Esto nos lleva a...
.¿Está la solución dentro del problema? ¿Es posible seguir pensando que la misma sociedad en la que se dan estos crímenes tenga la solución para que paren de tener lugar? ¿Es posible seguir pensando que en una sociedad como la nuestra en la que se disparan los crímenes violentos de este tipo, y donde no se termina el terrorismo, sea posible la reinserción completa y satsisfactoria del condenado? Aquí hay un debate tremendo que los políticos no quieren ni mirar; pero que sirve de atizador. Si opinas que no, a las preguntas de antes, sale uno que se dice progresista y te llama facha y retrógrado; y si dices que sí, sale uno que se hace llama conservador y te llama radical y reaccionario.
[Un momento... una pausa.... Aquí hay que decir que no podemos dar solución a las cosas difíciles con la simplicidad de las frases y calificativos de siempre que ya están manoseados. No queda más remedio que mirar lo que somos, a dónde nos dirigimos y si queremos ser así o ser de otro modo. y sobre todo superar este maldito y cansino maniqueísmo, a sus defensores y a todos aquellos que siguen aprovechándose de él. Si no somos capaces de superar la posguerra, la Transición es una mentira toda ella. Pero sea como fuere, a los tigres y a los leones, a los rojos y a los azules, a los progres y a los neocon, a socialistas y populares... ¡Irse todos al mismo carajo!]
La sociedad debe tener mecanismos de reflexión, debate y crecimiento. La Educación y su reforma es crucial a largo plazo. Pero a corto y medio plazo se necesitan intervenciones sutiles pero contundentes. La Justicia y las Leyes han de ser reformadas en el consenso político, pero también social.

16 de febrero de 2009

Gasol

Los Hermanos Gasol en el ALL STAR WEEKEND de la NBA en PHOENIX.
Cuando las cosas se hacen bien suelen salir bien. Enhorabuena.

15 de febrero de 2009

Marta

La enorme tragedia vivida por esta pobre chiquita sevillana y su familia nos deja a los demás la imperiosa tarea de reflexionar sobre lo acontecido antes y durante los sucesos. Y sobre todo lo que va a acontecer a partir de ahora, ya que esto no ha terminado todavía.
Lo primero dar el pésame a la familia, esperando que el sufrimiento inagotable de esa pérdida tan grande sea mitigado por la esperanza de la justicia.
Luego me vienen un cúmulo de pensamientos que sólo nombraré por cuestión de tiempo y espacio.
Nuestra sociedad debería plantearse seriamente algunas cuestiones relacionadas con su población adolescente y jovén.
También tendría que comenzar un profundo debate público sobre el impacto de la nuevas tecnologías sobre la realidad que vivimos. Del mismo modo que yo ya puedo escribir y cualquiera puede leerme y eso es algo positivo, cualquier malvado encuentra las puertas abiertas para sus fechorías. La responsabilidad y el aprendizaje de que no hay monedas con dos caras, esto es, que no hay acción sin consecuencias neutras debería ser el pan de cada día en la escuela y los medios de comunicación. Y no lo que hay ahora. La escuela es un campo de batalla, uno más, entre los tigres y los leones y de la tele ya ni hablo. Es una montaña demasiado grande para una espalda tan pequeña. Habría temas que tendría que ser tratados con templanza, sin enarbolar banderas ni credos políticos o religiosos, dejando los reproches fuera del diálogo. El sentido común y la responsabilidad no pertenecen a ninguna ideología, a ningún partido político y a ninguna Conferencia Episcopal.
Pero esto que he dicho, bajo cierto punto de vista, ya sirve de poco: el daño está hecho. Puede ser relegado a un segundo plano, no al olvido. Este asunto puede ser retomado más adelante y con serenidad, con pausa y sosiego; pero con profunda complejidad. Hay mucho en juego como para dejarse llevar por las prisas y los apasionamientos negativos que provoca el dolor.
Ahora lo importante es: ¿y mañana qué?.
Y chocamos contra un muro enorme que no esperábamos.
Chocamos con las promesas incumplidas de los que siempre prometen pero siempre mienten, chocamos con la manipulación que algunos hacen con el dolor ajeno, bien para sacar tajada, bien para conseguir afianzarse en su poltrona.
Chocamos con un sistema judicial lento e injusto. Chocamos con un sistema judicial lleno de fallos, incoherencias y resquicios, que lo hacen el lugar propicio para que algunos se muevan en él como cerdos en un charco de lodo.
Chocamos los demás, y especialmente la familia, con que el sospechoso-culpable-reo tiene más derechos que los afectados. Chocamos con que la ley suprema de la nación piensa en el presunto criminal antes que en la segura muerta y sufriente familia.
Chocamos con un sistema legal y judicial viciado, llenos de listos de millonaria minuta que se parten su prodigioso craneo no en que prevalezca la verdad, sino en buscar los pequeños agujeros del sistema por donde meter un elefante y salir ganando. Chocamos con que las penas hablan de muchos años pero la realidad de los regímenes peticenciarios muestran otra cosa diferente.
Todos esos choques son los que nos esperan. Esperemos tener la cabeza lo suficientemente dura para aguantar tanto porrazo.

14 de febrero de 2009

Que sea la estrategia, y su razón, lo que mueve al hombre en el universo, es una verdad que es imposible de ser aceptada por muchas personas en todos los tiempos.
Porque aceptarla es aceptar previamente que la maquinación y el mal puede habitar dentro de todos y cada uno de nosotros. Ese pensamiento es un auténtico cortocircuito vital en las mentes de mucha gente.
Otros no lo aceptan por haber sido educados en la creencia de que el mal no existe, solo existen las distorsiones psicológicas. Y el mal en su estado puro no entra en sus tablas de mediciones y pesos, no aparece en su catálogo legal.
Luego están los listos que no solo saben de la existencia de esa verdad, sino que la utilizan contra todos los demás en su beneficio propio. Estos son, desde luego, los peores.

12 de febrero de 2009

Antes nombramos a uno de los pensadores más importantes del s. XX.: Groucho Marx.



¡Impresionante!
Dedicado a todos los que piensan, a todos los que les gusta pensar, a todos los que les gusta pensar leyendo mis cosas, y a todos los que les gusta este genio.

PD: Espera a que termine todo el video y luego saldran, en la parte de abajo, otros trozos de escenas míticas.
La situación actual, la famosa cacería, el contexto previo y las implicaciones posteriores, es el paradigma de lo que vengo argumentando desde hace tiempo, antes incluso de empezar a escribir en este blog. Los dos trenes chocan y chocan, y vuelven a chocar. Tigres y leones (gracias Torrebruno) siguen dándose caña sin parar ni aprender de sus errores.
Además termina por convertirse en un auténtico diálogo de besugos, en la más pura línea marxiana (la de Groucho claro está...esos momentos inolvidables de la 'primera parte contratante' o el mítico '¡más madera!'). Cada uno habla de lo suyo en sus lugares habituales y son defendidos por los tertulianos habituales. Incapaces de oír al contrario, incapaces de convencer a otro alguien. Sólo tienen adeptos y acólitos. Son un fiel reflejo el uno de otro. Y encima se te enfadan con mucha dignidad y orgullito, porque no son iguales:' ¡yo no puedo se igual que esa gentuza!' te dicen. Desde luego han conseguido maquillar el odio y el desprecio por el otro con pinturas y cremas de las caras.
Que si es obsceno, que si cada uno usa el tiempo libre como quiera, que si las formas son importantes, que si tu más porque eres un ratero de cuidado y esto es una pantalla, que si tu más porque eres más corrupto que yo, que si te inventas conspiraciones, bla,bla,bla, y así un larguísimo etcétera donde se terminan mentando mutuamente a los muertos de cada bando y a las barbaridades de la Guerra Civil. ¡Tremendo!
Yo me niego en rotundo a alinearme o posicionarme con alguno de los dos bandos, me niego en redondo a formar parte de esta bipolaridad absurda.

Aquellos maravillosos años...

El actual estado de la política nacional es un auténtico pifostio que no para de crecer.
En el post de hoy he invitado a un experto en política lúdica para que aporte su docta opinión. Se trata, sin duda, de uno de esos pensadores de altura, el que justamente puede aportar luz a este asunto, para que nos ilumine con su verbo fácil, sus metáforas certeras y sus preclaros argumentos.


¡Impresionate verdad!

11 de febrero de 2009

La Invasión de China (III)

Los del traje caro se cabrean un montón entre copita y copita de cognac del bueno claro, que el buen gusto es importante. Cogen el teléfono y les cantan las cuarenta a los Gobiernos occidentales, que no olvidemos que aunque las ignoren por hacer caso a sus amos fueron elegidos democráticamente por las ciudadanías. Los politicastros de turno como buenos y obedientes canes ponen a disposición de las Multinacionales sus Fiscalías y Servicios Policiales para que luchen contra el plagio, que la verdad es que es ilegal. Y callan como canallas cuando Yonks se lleva la fábrica de pienso para lagartijas a China dejando paradas a 2 comarcas y media.
En China han adoptado lo peor de este feroz y desalmado capitalismo neoliberal globalizado y lo han aunado al peor de los totalitarismos fascistas. Es un arma perfectamente engrasada, además de imparable e indesmontable, y muy temible mas ahora que la dirigen hacia todo el mundo. ¿Cómo?
Cuántas veces en el último año nos hemos dicho: ¡vaya! han puesto un chino barato donde antes estaba la tienda de muebles. O mientras vas con el coche: ¡Mira chati! donde antes estaba el concesionario de coches de segunda mano hay otro chino barato. ¿Cuántas? Muchas verdad.
Uno que aunque de letras, sabe algo de economía por aquello de sacar adelante a una familia con un sueldo normalito y pico, piensa que cómo es posible que pagen ese solar tan caro, ya que está en el centro del pueblo, y luego lo llenen de cosas hasta arriba.
Es el Gobierno Chino el que paga todos esos gastos, y el que se hace cargo de todos los impuestos que se generan; además de los acuerdos bilaterales del Gobierno con China; que aunque no son secretos tampoco los conocen mucha gente. Estaría bien que se publicaran y supieramos así todas las ventajas que tienen.
No quiero quitarles sus derechos, quiero una competencia leal, cosa que hoy por hoy no existe. Trabajan día y noche, de lunes a domingo y en todo tipo de festividadades, pasándose los horarios oficiales por el mismo forro del que hablábamos antes, cargándose las microeconomías de barrios y ciudades enteras. Esta es la primera invasión, tan lejana y kafkiana que nadie se entera.
La segunda invasión, y aquí lo dejo, que ocurrirá tarde o temprano vendrá cuando el Gobierno chino ofrezca a los Gobiernos pagar las deudas externas y/o intervenir con su capital al saneamiento de las Multinacionales de los trajeados bebedores de buen cognac.

La Invasión de China (II)

La Multinacional Wuaik quiere montar una fábrica de churros largos verdeazulados para la crin de caballo tordo, que se van a vender a lo bestia cuando contraten a Michael Peñasco, la última megaestrella del country y del cine de títeres, para su titánica campaña publicitaria. ¡Un pelotazo vamos! No va a quedar hogar en el mundo que no tenga un mono churrito de colores en el caballo de los niños.
Los gestores de la citada Multinacional se encajan en China un lunes a mediodía y se reunen con los dirigentes del Politbureau chino. La primera sorpresa que se llevan los benditos es que todos los chinos tienen la misma cara con gafas de pasta y llevan el mismo traje gris oscuro feo de narices, que resalta más todavía con el azul marino de sus caros trajes italianos. La segunda sorpresa que los llena de regocijo y los pone al borde la eyaculación es que montar la fábrica les sale por dos duros. Los chicos de los trajes caros flipan en colores y eso que el opio chino no lo han visto ni de lejos. El martes noche ya estan de vuelta en sus lujosas mansiones: ¡Prueba conseguida!.
La voz se corre por todos los mentideros de 5 estrellas del orbe. A Wuaik, la siguen la Torrenz, ¡sí contra! esa que fabrica aceite de remolacha; la Tepez que fabrica radios para motosierras, a partir de ahora el mercado en los leñadores del norte de Europa no se les resistirá.
Casi todas las fábricas de los señores de los trajes caros italianos estan montadas en China. Ergo, China se convierte en el mayor polígono industrial del mundo. Ahora resulta que llegan los verdes diciendo que contaminan mucho. Los de los trajes caros dicen con voz seria, grave y judicial: ¡a mi no me mires pisha, que eso es suelo Chino!. Los del Politbureau se descojonan de la risa, incluso alguno se hace pipi encima del descomunal ataque carcajeril: 'en Europa llevais dos siglos contaminando a tope y ahora nos colgais el muerto a nosotros, irse todos al mismo c...'dijeron los chinos (en chino claro)
Y todos felices, unos con el churrito y sobre todo las Multinacionales que ganan una millonada con el idem. Los del Politbureau que aunque tengan caras de chino y de no enterarse de un pimiento, no tienen un pelo de tontos, empiezan a darle vueltas al asunto. Los trajes caros no los queremos, pero todo lo demás sí, incluido el resto del mundo. ¡Cómo aquí en China el sistema de patentes nos lo pasamos por el forro de los cojones, al lado de cada fábrica A, monto mi fábrica B y ahora la millonada también me la gano yo! Y ¿porqué? Porque el europeito de a pie me va a comprar a mi el churro de la marca 'jnhqwjhfjhw' (escrito en chino claro) a la mitad de precio antes que el Wuaik que cuesta una pasta.
Todavía resuenan los ecos de la juerga gitana que se montaron los del Politbureau. Los del traje caro pusieron mala cara, protestaron dignamente como lo haría cualquiera que hubiera estudiado en Oxford, Yale o la Sorbona: ¡Los chinos nos están tocando los cojones!

La Invasión de China (I)

El mundo pasa por una crisis financiera y económica de características homéricas. Si la situación persiste durante un año más la crisis será social, incluso cultural. Es posible que las calles se llenen de barricadas, que aumente el tráfico negro y se generalice-normalice el mundo de ultratumba de las mafias. Es posible que aumente la violencia de género y contra la infancia, debido al grandísimo número de hombres parados sin remisión y con una frustración gigantesca. En fin, el peor de los panoramas nos deja un mundo de esos de novela y cine de ficción al estilo Orwell, Blade Runner o Johnny Nmemonic. Por ahora, a los que vamos avisando de esta posibilidad plausible del futuro nos llaman demagogos y agoreros. Espero quedarme con esa etiqueta y no tener razón.
Pero en esta ecuación hay una incógnita de la que hace meses no sabemos nada. En prensa, radio y televisión, en internet también, oímos y leemos como el caos financiero avanza por muchos paises. De China hace meses que hay un silencio mediático casi absoluto. Y no solo es por el ferreo control de las autoridades. Desde la Olimpiada de Beijing todo lo que escuchamos de China es: nada.
Aquel evento fue el pistoletazo de salida a la mayor invasión que jamas hayamos vivido nunca. Es una invasión incruenta y sin derramamiento de sangre, no hay ni armamento de destrucción masiva ni ocupación de suelo extranjero por parte de esa potencia. Esto es una cosa completamente novedosa. Y lo más curioso es que las armas que utilizan no las inventaron ellos. Fue la muy occidental Globalización la que se las dio. Nos están golpeando con nuestro propio martillo.
Es importante dejar claro cuando se dice 'occidental globalización', que ésta sale de ahí y no que pertenezca a ésta. Yo como occidental no me siento propietario de semejante artilugio inmundo. Sería mejor decir que un sector occidental fabricó una estructura y la lanzó al mundo para que luego, como un boomerang, estallase en la cara de todas las ciudadanías occidentales.
Los Poderes Fácticos de las Finanzas y la Industria inventaron la globalización para poder enriquecerse ya no solo en Europa y Norteamérica, sino también, del resto del Mundo. Estamos hablando, simple y llanamente, de ansias de poder y codicia, pero rebozados de una manera tan especial, que parece algo muy complejo y complicado. Es como si invitamos a uno de estos nuevos cocineros de relumbrón para que te haga un 'aire de nosequeraro' pero en el fondo es la carne del puchero de toda la vida.
Ellos fabrican su juguetito y lo lanzan al mundo, los otros lo han cogido y lo han abierto en canal, diseccionando cada uno de sus mecanismos, le han hecho sus modificaciones y ahora nos lo devuelven con forma de virus mortal. Pero lo devuelven a la ciudadanía, porque toda esa ralea de factotums de los negocios, la economía y la industria y los politicastros que los apoyan sufren poco. ¿Cuántas noticias hemos escuchado en estos meses de que algún político de campanillas ceda parte de su millonario sueldo?¿Y los banqueros que no dan créditos se les congela el sueldo?¿Y los dueños de las Multinacionales que cierran en este país, dejaran de ganar sus millones? ¡Ninguna verdad! Por cierto, decir la verdad solo parece demagogia a la mente perversa que manipula esa verdad.

8 de febrero de 2009


Belvedere (1958) M.C. Escher [Grafica e Disegni]
Cuántos de nosotros somos capaces de ver el mundo como es; y a la vez, como no es ni será nunca; y a la vez, como podría ser en todo su amplio horizonte, desde lo más plausible a lo más descabellado y raro; y a la vez, permanecer impasible, aprendiendo de todo y de todos; y a la vez, desparramando sus enseñanzas a todo el que pasa frente a él; y a la vez, no ser juez de esos mismos que bien lo aprecian o bien lo desprecian por querer ser como es. Cuántos de nosotros, en estos tiempos que corren, proponen la pausa de la reflexión; y a la vez, la acción pronta pero mesurada, firme pero abierta. Cuántos de nosotros arrincona la soberbia del listo que todo lo sabe; y a la vez, abrirse a la calmada y humilde sabiduría del camino infinito. Cuántos de nosotros decide no escojer colores para su bandera, o buscarse un lugar en la trinchera donde apostarse a disparar; y a la vez, ofrecer a todo el que tenga algo de tiempo libre en su ajetreada existencia, una palabra o un pensamiento, quizás vano o superfluo, quizás frivolo o superficial, quizás sencillo pero profundo, o una caricia, o una mirada, o un 'tu vales mucho, no lo olvides', o 'tu sí que puedes'.


7 de febrero de 2009

¡A por el Rey de negras!

Los asesores de estrategia del partido en la oposición tiene que estar dándose de cabezazos contra todos los tabiques y pilares de su centro de mando. El país está atravesando por la mayor crisis económica y social que conocemos. Y el peor otoño-invierno que hemos tenido en décadas nos deja claro la falta de previsión y chapucería de muchos departamentos ministeriales.
Pero resulta que en vez de lanzar a toda su caballería a por la yugular del partido del gobierno, se tienen que replegar y poner a todo su ejercito a reconstruir sus maltrechas fortificaciones.
Un grupo de prensa afín al enemigo se parte las narices investigando y descubre una avergonzante trama de espionaje. Los medios de comunicación que creían a su lado, ahora no paran de ladrar en su contra. La eterna aliada de fechorías, la Iglesia Romana, le tira seriamente de las orejas. Y ahora, como culminación , la estrella mediática por excelencia de este país, el Juez garzón, descubre una trama de corrupción en infinidad de ayuntamientos por toda el país.
Al lider de la oposición no le salen las cuentas, a sus estrategas, desde luego, tampoco. O eso, o es que la estrategia de éstos es terminar de cargarse al rey y ascender a algún alfíl. ¿Cuál de ellos será?

5 de febrero de 2009

Para los que nos gusta la Sci Fi (2)


Buscando por internet me he encontrado este cartel apócrifo de Star Wars. Una pasada

El Tirachinas

Hasta hace poco había una línea que ensartaba necesariamente a la ideología y los partidos políticos con la acción política, en un triángulo en el que todos los lados y todos los ángulos eran igualmente importantes e imprescindibles. Actualmente esto ya no es así.
Ahora la primacía pertenece a los partidos políticos y la ideología es un pequeño apéndice en viás de extinción. Es un mero convidado de piedra. La gestión de los partidos en los diferentes gobiernos es casi idéntica ya que la Macroeconomía y las Multinacionales del Mercado (por cierto éstas no son estructuras democráticas pero que, sin embargo, tienen una influencia decisiva sobre los estados democráticos)marcan el ritmo, y sobre éste hay pocas variaciones. A lo sumo matices pintorescos. La ideología sirve en el mejor de los casos como vetusta vitrina de trofeos pretéritos. O una especie de dignidad o santidad chamánica que les legitima para hacer ciertas cosas. O un pedigrí que dice al que mira: 'este perro, aunque parezca un vil chucho callejero zarrapastroso, es un noble can de rancio abolengo'.
Los partidos políticos son un grupo de personas que se asocian a otros grupos de personas con el único fin de defender sus intereses propios y luego medrar hasta donde puedan. Lo fundamental es esto, y la razón de porqué funciona, es su simplicidad. Es tan simple como un tirachinas. Luego, para justificarse ante la ciudadanía, lo aderezan apelando al anteriormente citado pedigrí, y para los postres nos terminan diciendo que son ellos los que hacen las cosas bien y que con los otros la cosa sería catastrófica, porque son peores, más malos, su pedigrí está manchado.
Al nacer de la simplicidad, al ser lo simple lo que los mantiene vivos, tienden a simplificar todo aquello que pasa por sus manos, aunque sean temas de gran importancia. Lo alarmante llega cuando para mantener viva esa simplicidad ponen en marcha complejas maquinaciones. Verbigracia, la razón estratégica y todo su arsenal de guerra: mercadotecnia, herramientas de demoscopia, asesorías de imagen, manipulación de masas, medios de comunicación afines y estrellas mediáticas defensoras, opinólos y tertulianos, etc. Consiguen que seamos los demás y entre nosotros, en la calle, en las plazas, en internet, los que nos peleemos por lo que hacen ellos.
Lo que me da miedo a mi de estos momentos duros son ellos, los políticos y los partidos políticos, sus miserias, sus planes electorales a corto plazo, bien para no perder la poltrona o bien para pillarla de nuevo, siempre mirando de reojo que la aritmética electoral no los mande al infierno un domingo de madrugada.
Estamos atravesando por graves problemas, pero los partidos políticos deberían de cambiar el enfoque. No sólo el de apoyarse y ayudarse, y juntos a toda la ciudadanía que los necesita. Sino un cambio radical de modus operandi y de conciencia. Aceptar la complejidad de la vida del hombre en sociedad, convertirse en una complejidad que comprenda lo complejo para luego ser capaz de dar respuestas, sin maquinaciones, simples y cercanas al individuo.

2 de febrero de 2009

Del rico refranero castellano, hay uno que me gusta especialmente. Dice así: 'Quien siembra vientos recoje tempestades'. O como cantaría Drexler: 'Cada uno da lo que recibe'.
No sólo pienso que sea una verdad que se hace realidad; es mucho más. Una esperanza, un palpito, un deseo irrefenable de justicia etérea, infinita y cuasidivina. Aún más...
No sólo pienso que debería de pasarle a todos los boni, como diría el pesado de Cicerón, y que éstos tuvieran el justo premio a su vida. Es también mucho más. Es la esperanza y el sueño de que los dogmáticos reciban justa recompensa a sus maldades.
El dogmático, en sus tres formas cardinales, emocional, político y religioso han sido, son y serán, por desgracia, la peor amenaza para la propia verdad que dicen y piensan defender como si fuera de su propieadad, truncando de paso la vida de millones de personas a los largo de la historia pasada y del devenir futuro.
A todos éstos, refrenando el odio y la acritud que me convertiría en uno de ellos; y es que es importante no ser uno de ellos, sólo les diría aquello de que quien siembra vientos recoje tempestades.