30 de diciembre de 2012

Reflexiones Patibularias 43

XLIII


No creo que exista ni un sólo pensamiento, ni un sólo argumento que no pueda retorcerse y retorcerse a nuestro antojo. 


Me parece a mí, que la voluntad de poder es más fuerte que la lógica.


26 de diciembre de 2012

Reflexiones patibularias 42

XLII

Un padre y su hija charlan a la orilla de un río, mientras éste prepara lo que parece ser el brebaje del almuerzo. Detrás de la pequeña puede verse cómo una comitiva fúnebre porta una persona muerta. Todo indica que estamos en un país asiático y que el padre de la niña o es un antropólogo o es un médico, quizás un misionero ya que puede verse cómo le cuelga una cruz del cuello. 

Niña: ¿Qué le ha pasado a ese hombre?
Padre: Ha muerto.
Niña: ¿Porqué no le ayudas papá?
Padre: No quieren mi ayuda. Su dios es distinto al nuestro.
Niña: ¿Porqué ha muerto?
Padre: Tarde o temprano todos moriremos.
Niña: ¿Como mamá?
Padre: Como mamá.
Niña: ¿A dónde van?
Padre: Cada uno lo llama a su modo... cielo, paraiso... se llame como se llame es un lugar precioso.
Niña: ¿Cómo sabes que es precioso?
Padre: Por que así he decidido creerlo...

Decidimos cosas a cada instante. A veces son cosas nimias y otras tan importantes como creer o no en el más allá. Somos así, construimos y construimos, el aquí y el ahora, pero también construimos y creamos lo que hay dentro de nosotros. Creyendo, creamos incluso lo que hay más allá. Somos dioses. Somos creyentes creadores de nosotros mismos al querer creer lo que estamos creyendo.

[El diálogo lo he sacado de la película de Ridley Scott, 'Prometeus', una de las mejores películas de este año (para mi, ha sido la mejor junto a Dark Knight Rises). Mucha gente ha entendido muy mal esta película, y no le gusta porque esperaba de ella una orgía sangrienta de sangre y mocos verdes. Y Prometeus no va de lo que pasaba antes de Alien, Prometeus va de lo que pasaba antes de todos nosotros. Es una película que invita a pensar, a filosofar sobre nosotros mismos, nuestro origen y las creencias que sobre estos tenemos y construimos. Claro... gente poco acostumbrada al pensamiento en su día a día cotidiano es normal que diga que es un churro de película. Por eso esta gente decide creer que la peli no vale nada. Una peli salvaje de sangre y visceras de miedo y terror te deja el cerebro anestesiado durante un buen rato. Una película que te hace pensar, que mueve los más profundos cimientos suele incomodar]. 

8 de diciembre de 2012

Reflexiones patibularias 40

XL

Todo progreso tecnocientífico tiene un correlato inevitable: las consecuencias imprevistas. Los técnicos diseñan, prueban y testean pero no son dioses para establecer a priori todas y cada una de Las consecuencias que sus avances depositan en la sociedad. Cada nueva oleada de avances invade la realidad de la vida antes de que sepamos cuáles serán sus efectos. Así, cada nueva oleada es un experimento social masivo y a gran escala: la Modernidad convierte al mundo en un laboratorio, y a nosotros en cobayas.
La última oleada viene de la mano de los smartphones, el Ipad, el android, las app, el Whatsapp, el Instagram, etc. El mundo se lanza a usarlos y consumirlos, y en pocas horas están tan acostumbrados que parece que forma ya parte de sus vidas, y si les falta,les falta el pan y la sal. 
Con esta reflexión no estoy haciendo una llamada a las armas contra la tecnología. No se puede negar los beneficios. Pero no se puede negar, tampoco, que tras estos hay imprevistos funestos. Repito lo que siempre repito: NO HAY MONEDAS DE DOS CARAS.

6 de diciembre de 2012

El vínculo de las relaciones interpersonales con la salud y la enfermedad

En el estamento sanitario hay personas de buen corazón, pero es cada vez más evidente que la cultura médica reprime, llegando a destruir, el interés empático y convirtiendo al paciente en una víctima del tiempo y del dinero. Tan confiados estamos en la tecnología médica, tan preocupados en ser objetivos, en respetar escrupulosamente el método científico que se olvida al paciente y su cuidado. Dejamos que las máquinas y las pruebas se ocupen del paciente. Y ahora, en esta última década, con el desembarco de la gestión y el miramiento por el dinero, el asunto empeora. 
Hay que volver a cuidar al paciente, a prestarle atención, no solo a los síntomas de su enfermedad; estos viene 'dentro' de una persona. A toda ella hay que cuidarla. El componente emocional en el mundo sanitario ha sido desplazado al banquillo de los suplentes. Relegado por irracional e inservible, por entorpecer lo que se supone auténtica labor científica. Se valora extraordinariamente la competencia técnica individual, pero poco o nada la competencia emocional con el paciente y con el resto de miembros del equipo sanitario.
Y resulta que lo relacionado con la competencia emocional y con la incidencia de las relaciones positivas sobre la salud no tiene nada de charlatanería acientífica o el curanderismo primitivo. Hay muchos trabajos científicos que hablan de esto. El más conocido quizás, por el impacto mediático que tiene, es el trabajo de Daniel Goleman, Doctor en Psicología por la Universidad de Harvard. Expongo un fragmento de su obra:

Los sistemas biológicos clave que vinculan el estrés a la salud son el sistema nervioso simpático (SNS) y el eje hipotalámico-pituitaria-adrenal (HPA). Cuando nos hallamos en una situación estresante, el SNS y el eje HPA asumen el reto, segregando hormonas que nos preparan para hacer frente a la emergencia o la amenaza. Pero para ello apelan, entre otros, a recursos procedentes de sistemas tan esenciales para la salud como el inmunitario y el endocrino, lo que puede acabar debilitándolos, ya sea durante un instante o incluso, en ocasiones, durante años. El estado emocional activa o desactiva los circuitos del SNS y los del eje HPA generando estrés, en el peor de los casos, y felicidad, en el mejor de ellos. Y dado el poder que tienen los demás sobre nuestras emociones (a través del contagio emocional, por ejemplo), el vínculo causal va más allá de nuestro cuerpo y llega a extenderse al mundo de nuestras relaciones. Los cambios fisiológicos asociados a los altibajos aleatorios de las relaciones no tienen, en este sentido, mucha importancia. Sólo cuando esos altibajos perduran durante muchos años pueden acabar provocando niveles elevados de estrés biológico (técnicamente conocidos como carga alostática) que precipitan la aparición de una enfermedad o empeoran sus síntomas.
El modo en que una determinada relación influye en nuestra salud depende de la sumatoria de interacciones emocionales positivas y negativas que tengamos a lo largo de los meses y los años. Cuanto más débiles nos hallemos como sucede al comienzo de una enfermedad grave, durante el proceso de recuperación de un infarto o cuando alcanzamos una edad muy avanzada más poderoso es el impacto de las relaciones en nuestra salud”.

Este fragmento lo que cogido del libro 'Inteligencia Social'; la quinta parte del mismo, 'Las relaciones sanas' sería una lectura obligatoria para todos los profesionales sanitarios. Las emociones tienen mucha importancia en la salud. El reconocimiento, la consideración, el trato amable y atento, alivian el sufrimiento; mientras que el estrés, las prisas, la poca atención, lo intensifica. Aunque el diccionario diga lo contrario, la compasión no es tener lástima ni pena por el otro que sufre. Compasión es la conexión emocional que se establece entre una persona que sufre y otra persona que la apoya y cuida. 
Un último fragmento:
la proximidad emocional resulta mucho más valiosa en el caso de los pacientes clínicamente más frágiles, es decir, los que padecen enfermedades crónicas, los que tienen un sistema inmunitario más débil y las personas ancianas. Con todo ello no quiero decir que este tipo de atención sea una panacea, pero los datos de las investigaciones realizadas al respecto ponen claramente de relieve su extraordinaria importancia. En este sentido, el amor resulta sumamente valioso, porque no sólo mejora el tono emocional del paciente, sino que también constituye un ingrediente biológicamente activo en cualquier tratamiento”. 

Hay que recuperar la compasión por el otro en el cuidado. ¡Menudo reto!

El libro al que hago referencia es:
Goleman, D. Inteligencia Emocional, Kairós 2006 (ISBN 9788472456303)

Daniel Goleman es Doctor en Psicología por la Universidad de Harvard. Trabajó como periodista y divulgador científico en el periódico The New York TimesHa sido editor de la revista especializada Psychology Today  y profesor de psicología en la Universidad de Harvard.






16 de noviembre de 2012

Reflexiones patibularias 39

XXXIX

Lo que late en las mentes de los políticos da miedo de verdad.
Tanto de un partido como de otro, cuando ocupan los gobiernos y ocurre algo de trascendencia social, y la gente clama por un cambio, sale la frase: 'No se puede legislar en caliente'. Luego siguen farfullando con mucho bla, bla, bla.
Se me ocurren un buen número de casos en las últimas décadas. Y no le hacen ni puñetero caso a la ciudadanía. Ayer, tras un puñado de días, a prisa y corriendo, sacan un Decreto para atajar el grave asunto de los desahucios. Y que no se me entienda mal, que esto no va en contra de los que están en ese filo de la navaja. Un Decreto que no deja contento ni a tirios ni a troyanos, que unos ven excesivo y otros escaso. 
La cuestión es que lo han hecho, punto pelota. Ahora hay que esperar al trámite parlamentario para el pulimentado final. Se pondrán las medallas al valor, por la gran gesta realizada, por la enorme epopeya resuelta y a seguir jodiendo, que es lo suyo. Y en caliente... por el acojone tan bestial que tienen, ya que otra oleada de suicidios y tragedias personales sí que incendiaría la opinión pública, sería un tsunami que les haría pupa de verdad. Lo hacen por miedo, es el temor lo que mueve sus mentes ruines y mezquinas. Conciencia no, esa la mataron al aceptar el acta de diputado y todos los demás privilegios.

14 de noviembre de 2012

La galería de los horrores

¡¡¡Pasen y vean¡¡¡¡
Escoja de entre lo que hay, con cual se queda y con cual se iría al WC a limpiarse aquello...

14 N... Huelga General...
Entre las 15:30 y las 16:00
Pantallazos de los principales periódicos en sus ediciones digitales...








Esta noche me voy a trabajar, por supuesto, no está la cosa para regalar más dinero... mañana más...

13 de noviembre de 2012

Reflexiones patibularias 38

XXXVIII

Nada humano es eterno.


Un poema de Yeats y la suave voz de una mujer que lo canta... 




Un escoces que se fué a vivir a Brasil...



El día que a Enya le salió la vena Beattles y metió un punteo rock en su canción...




Aunque hay cosas maravillosas que aunque no sean eternas sí que nos acompañan mucho, mucho tiempo...

31 de octubre de 2012

Reflexiones patibularias 36

XXXVI


Caída la Gran Verdad, el Relato Absoluto y Todopoderoso, todo lo establecido a partir de ahora es provisional y contingente. Nos queda elegir entre el escepticismo, el buen humor, el sarcasmo, la ironía y el cinismo, la rebeldía y la indignación, también el mito y el símbolo, el debolismo y el relativismo, para hacernos cargo del mundo-realidad en el que existimos. De entre los restos del estropicio, habrá que ir entresacando aquello que sirva para cada proyecto personal. Cada cual, en libertad, puede y debe ir reconstruyendo su propio escenario con los elementos que su prudencia (phronesis) le aconseje. El eclecticismo (por utilizar una etiqueta que sin ser exacta puede ser entendida fácilmente) no presupone la pérdida del espíritu crítico y reflexivo y que todo valga porque sí. No es un problema, no es vacío, ni simpleza, no es un camino fácil, no es confuso ni preocupante. Estas etiquetas prejuiciosas disfrazadas de argumentos son lanzadas por los nostálgicos del poder que ven impotentes cómo éste se les escapa de las manos como la arena. No deja de ser sospechoso que mientras dan una faz de pesadumbre por el derrumbe moral en el que vivimos, siguen queriendo imponer el modelo fallido. Si no se está con ellos y su fundamento fuerte, acuden al etiquetado ramplón de relativista e irracional. Suya es la exigencia de racionalidad, suya es la verdad, suya es la capacidad de determinar quién hace auténtica filosofía, suyo es el poder de decidir lo moral y lo inmoral. Por esto, más preocupante, me parece que son los que ven como problema y preocupación la reconstrucción de nuevas racionalidades, el pluralismo, la heterodoxia, la multiplicidad de seres y estares, la hibridación, el mestizaje, el hermanamiento, la integración, la coimplicación. 

28 de octubre de 2012

Reflexiones patibularias 35

XXXV

No hay nada más importante que la felicidad de un niño. Y pocas cosas hay en la vida más gratificantes  que ver a un niño disfrutando, sonriendo, pasándoselo bien junto a otros, corriendo de aquí allá. A los adultos, especialmente a alguno de ellos, bien que podría partirnos un rayo cien veces cada vez que impedimos la felicidad de uno de ellos.


16 de octubre de 2012

Reflexiones patibularias 34

XXXIV

He tenido una epifanía. La verdad me ha sido revelada. No se qué carajo voy a hacer con ella, pero la tengo. He de comunicársela al mundo mundial, no puedo quedarme con este pellizco cogío en el pecho. Doc se pegó un carajazo en el baño y se le apareció el 'Condensador de Fluzo'. Así Marty McFly pudo regresar al futuro y pasárselo chupiguay en el Far West con Buford Perro Rabioso Tannen. Gracias Zemeckis, gracias Spielberg.
Yo estaba secándome después de la ducha. Tenía puesta la tele en la habitación de al lado, con el telediario puesto. Y sale la noticia de la red de mafiosos chinos que han trincado en los madriles. Y... han trincado a Nacho Vidal...¡Tremendo! La gran polla hispana por excelencia; con cada uno de sus empellones, demostraba lo mejor y más granado de nuestra historia y cultura. El informe educativo de la UNESCO acaba de corroborarlo. 
Me he quedado como anonadado. Tanto... que me estaba metiendo por el oído derecho un bastoncillo cotonete (¡fíjate! habrá algo freudiano ahí) de Johnson's & Johnson's y me ha llegado al sentío. Y en ese momento en el que los sentidos quedan nublados por el dolor puzante, en el que la mente pensante queda paralizada por la laceración en el fondo del conducto auditivo externo, me ha venido la epifanía. Ha caído sobre mi ser la luz rotunda de la verdad evidente.
La crisis mundial, el que todo el mundo esté tieso como las mojamas, que no haya dinero, que se haya perdido, y esfumado. Es... (¿¿lo digo, lo digo??) por los anunnaki... ¡Lo sé, lo sé!...Sí, que no estoy loco ni me he fumado nada. La profecía maya dice que nos vamos al garete ya mismo. Y los ricachones del mundo han contactado con estos cabezones verdes para que les manden un taxi espacial y les busquen un planetita vacío por ahí lejos para repoblarlo. Y claro, el ladrillo en esa parte de la galaxia cuesta un pico, y la nave espacial que mandan es clase Bussiness, ¡coño! y eso hay que pagarlo. 
PD: ¿Para qué creéis que el tal Baumgartner ha subido tan alto, porqué el Red Bull te da alas? Anda ya... lo han mandado los ricachones oligarcas para quedar, definitivamente, con los marcianitos, para saber cuándo vienen a por ellos. 


¡Qué no diga nadie que no avisé!

14 de octubre de 2012

Emociones

Cuesta abajo y sin frenos, la velocidad aumenta exponencialmente hasta pegarnos el castañazo. Entramos en una dinámica negativa difícil de frenar (aunque no imposible). Así son algunas emociones que nos atenazan y secuestran.

El enfado.
Es necesario que concurra, previamente, un estado de irritabilidad. Un 'mar de fondo', por decirlo de alguna manera entendible. Y, además, una situación 'gatillo' (trigger) que suscite el secuestro emocional. El cabreo posterior tendrá una intensidad especial, en forma de escalera autoextensible. El enfado se construye sobre el enfado: un primer pensamiento es detonante de otro más intenso, y este segundo, a su vez de otro, el tercero, de mayor intensidad, sin que el primero de ellos se haya disipado todavía. La irritación siempre va in crescendo, pudiendo desencadenar en violencia. Aparece la incapacidad cognitiva, la persona se cierra al razonamiento y los pensamientos escasos que quedan gravitan en torno a las represalias, alimentando el fuego del enfado sin considerar las consecuencias de sus actos. No es desde fuera, no son los otros, es la propia mente la que echa 'más leña' al fuego del enfado.

La preocupación.
Preocuparse es ponerse en alerta ante un problema potencial. Es la consideración de múltiples alternativas de respuestas posibles que solucionen el problema. 'Comerse el coco' es algo natural y positivo, esencial para la vida. Pero si la preocupación no es efectiva, no encuentra ni soluciones ni salidas, se torna crónica y reiterativa, como un disco rayado que salta y salta en la misma vuelta volviendo hacia atrás para comenzar de nuevo una y otra vez. La preocupación termina siendo un secuestro emocional. Aparece la incapacidad cognitiva, cerrada al razonamiento sólo se tienen pensamientos cíclicos y cada vez más rígidos, pudiendo desencadenar compulsiones o ataques de pánico.

La tristeza.
Aunque pueda parecer otra cosa, la pena tiene una importante vertiente positiva: poner una pausa momentánea y renovadora a nuestra mente. El enlentecimiento de la tristeza es un refugio o retiro apaciguador para asimilar las pérdidas y establecer nuevos planes o ajustes psicológicos toda vez que se reanude la velocidad de crucero vital. Pero si va más allá de la pausa momentánea hasta producir la paralización de la vida, el aislamiento, la apatía, la confusión, el insomnio, etc. nos encontramos con la depresión. Los pensamientos de la tristeza son automáticos, se 'cuelan' en la mente sin avisar y de modo inesperado. De modo que se puede ser consciente de uno de ellos y cazarlo, desmontarlo, cuando ya se han 'colado' otros dos 'sin darte cuenta'. La incapacidad cognitiva aparece porque los pensamientos automáticos se asocian o encadenan masivamente como si estuvieramos disparando un rifle de repetición, van dándose pié, empujándose o agolpándose unos sobre otros. Es uno de los mayores secuestros emocionales que existen, tanto que puede la cosa terminar en suicidio.

Pd: No quiero meterme en el campo de la psicología; por eso no hablo de soluciones ni tratamientos. De eso han de ocuparse los profesionales que saben lo suyo de lo suyo. Ocurre que estoy leyendo un magnífico libro sobre este tema y eso me ha recordado una situación que viví hace muchos años y que no quiero perder nunca de vista. Es bueno recordar, preocuparse, para llegar a soluciones y que las emociones no terminen por secuestrar tu vida. El libro que recomiendo es 'Inteligencia emocional' Daniel Goleman Paidós 1996

8 de octubre de 2012

Reflexiones patibularias 33

XXXIII

Durante años he oído como compañeros, amigos y familiares culés decían, no sin cierta indignación que no se mezclara fútbol y política, que si se habla de fútbol se habla de  fútbol y si se habla de política se habla de política. Después de lo ocurrido ayer no sé qué es lo que pensarán; si están decepcionados o no, más aun cuando ha sido la propia institución la que oficialmente ha propiciado esta situación. Este tipo de cosas son un serio golpe a la pretensión universalista de la organización barcelonista y a la capacidad pacificadora del deporte en general. Ya entiendo lo que ellos decían, no es bueno mezclar las cosas, por el daño tremendo que se hace. 
Y dicho esto, que ya está olvidado hasta la próxima, el partido terminó siendo un Messi vs Cristiano. Como siempre, los árbitros regular tirando a mal y poco más; 2-2 y para casa todo el mundo, hoy es lunes y hay que seguir penando por la crisis.

6 de octubre de 2012

¿Qué hacemos con el amor?

El amor no es mentira, pero tampoco es Verdad. Los que sí mienten son los poetas; mienten bonito pero mienten al fin y al cabo. El que creo que no miente es Clint Eastwood y el maravilloso 'documental' (nunca la entendí como película romántica, que quieren que les diga) rodado hace ya algunos años: 'Los puentes de Madison'.

¿Qué es lo que hace que el amor muera en una relación? No me cabe la menor duda, en la mayoría de los casos, la rutina del día a día es una auténtica trituradora que puede con casi todo. La realidad es demoledora. Es una jodida máquina de guerra, perfectamente engrasada capaz de acabar con los más bonitos sentimientos 
¿Cuáles son los puntos de quiebra de ese día a día? Propongo una breve lista:
- El trabajo, sus horarios y los turnos.
- Las labores rutinarias del hogar y el reparto (o no) de tareas.
- Reparto (o no) de roles y responsabilidades.
- Educación, escolarización y disciplinamiento de los niños.
- Cansancio, agotamiento, dolencias osteoarticulares y otros males.
- Malos hábitos de sueño.
- Excesos televisivos, informáticos, deportivos, bricomaníacos, etc...
- Familias propias y ajenas.
- Familiares enfermos o incapacitados.
- Fantasmas del pasado y situaciones no resueltas en su momento.
- Aburrimiento, inapetencia sexual, y cuestiones afines.
- Olvidos, despistes y malos entendidos.
- Cuestiones económicas y financieras.

Estas cosas, nimias muchas de ellas, generan, sin duda, un amplísimo ramo de discusiones, disputas y conflictos. Es una erosión constante, imperceptible pero contundente. Al día le faltan horas, no para estar juntos, sino para hacer todo lo que hay que hacer; y le faltan momentos, no para comunicarse, sino para discutir y echarse cosas en cara. ¡Qué bonito sería decir que el discutir no influye tanto en una relación como el amor! Pero ya son muchos los que saben que la perfección no existe. Queda lo que queda, frustración y mucha energía negativa. Y tanta, que parece que todo es malo y ya ni recuerdan aquello por lo que se enamoraron. Mucho orgullo y poco perdón y comprensión son una fórmula química devastadora; que empeora con la decisión equivocada de buscar culpables antes que soluciones. Y mantener esas altas dosis de energía negativa durante mucho tiempo no es bueno, como muchos también saben. 
Es muy difícil cambiar esa dinámica negativa, para que funcione el arreglo tienen que ser los dos, a la vez y en conjunción de esfuerzos, los que arrimen el hombro; lo que en sí mismo puede ser utópico. Después de todo esto, del día a día truculento, del sufrimiento, el cansancio y la frustración, ¿a quién le quedan ganas de conversar, de reír, de repartir caricias, de erotismo y sexualidad, de compartir un café, una copa o una película en el cine, o simplemente, deleitarse con la presencia del otro? 

Como verán no soy un romántico. ¡Cielos, ni pretendo serlo! Por desgracia se han sobrepotenciado los elementos amorosos de las relaciones y se han infradimensionado los aspectos contractuales. Una relación no deja de ser un 'convenio contractual', que tiene una serie de implicaciones; pocos se hacen cargo de esto en toda su dimensión. La cuestión no está en quitarle todo el romanticismo a la cosa, sólo cambiar un poquito del mismo por estrategias, diálogos, cesiones bilaterales y acuerdos. Cabeza fría y corazón caliente, no digo más.
La mayoría de la gente afirmaría si le preguntaran que lo más importante en una relación es el amor. Responden según sus deseos sin mirar la realidad real que les rodean. Es la disputa. El día a día en el mundo en que vivimos, en la vida que nos hemos obligado a vivir, potencia y saca a relucir aspectos que poco o nada tienen que ver con el amor. El desgaste de ese día a día es el que empuja a cabrearte con el que tienes más cerca. La novelas romanticonas y las películas de 'happy ending' nunca cuentan esta parte. 
Siempre he pensado y creído que la película 'Los Puentes de Madison' muestra el auténtico amor verdadero: fugaz, pasajero, intenso, indeleble e inolvidable. Amor sin día a día, sin esa cotidianidad tan corrosiva. Viviendo el momento presente en lo precario del secreto. No hay facturas que pagar, ni dolores de cabeza, ni horarios que cumplir,  ni dormitorios que pintar, tampoco niños que llevar al judo. No hay orgullo, ni amor propio, sin cuentas que ajustarse, ni cosas que echarse en cara. Sexo y pasión, comprensión y conversación, descubrimiento de uno mismo y de un otro furtivo, que llegó para no quedarse. Con tal intensidad y fuerza que la vida cambia para siempre. Eso cuenta la película. Al final también se marchita... no lo hace el recuerdo, ni la persona nueva y renovada que sale de todo esto. En definitiva, todo amor se marcha, el del día a día y el que es fugaz e inolvidable. ¿Qué nos queda ante este panorama desolador? A la inmensísima marea que vive en el día a día, entiendo que queda la inteligencia emocional, buscando equilibrios, buscar acuerdos básicos, unos mínimos que posibiliten la convivencia, esfuerzo para comprender, aceptando lo que llega y cambiando lo que se pueda sin violencias. A veces hay que romper, no se hable más; pero otras veces es preferible el mejor de los peores posibles al despeñadero. Y por supuesto, darse alguna que otra alegría, no por hacer daño al otro, sino por uno mismo, para compensar lo malo con cosas buenas, siempre con tacto, respeto y discreción. Hay que restañar heridas sin crear otras más profundas y dolorosas. Y sobre todo, dejar de discutir y de acumular energías negativas. 

4 de octubre de 2012

Reflexiones patibularias 32

XXXII

Hay que hacerse cargo de las consecuencias imperfectas de las propias decisiones y comprender las contradicciones intrínsecas a las mismas. Ergo, no hay moneda de dos caras.
Mucha gente protesta, se indigna, con mucha razón, sobre 'lo político' y su casta, la corrupción, la ineficacia, de espaldas a la ciudadanía, su mal funcionamiento ente otras cuestiones. Sale a la calle o lo expone gráficamente en las redes sociales. En eso no tengo intención de entrar. Sí entraré en otra consideración. De algún modo, entiendo, que este movimiento en el que esa parte de la ciudadanía se ha embarcado, es la petición de una mayoría de edad política auténtica y verdadera, de ahí esa formulación de democracia real, directa, no representativa, etc. Vale, muy bien, de acuerdo; hay que romper muchos siglos de tradición para tal cosa, pero independientemente de eso y sin entrar en  hondas cuestiones 'metodológicas', si se pide la mayoría de edad para una cosa hay que aceptar, velis novis, otras cuestiones de la adultez que van relacionadas necesariamente. Si quieres eliminar el Estado Representativo, con él se irán al traste otras cuestiones importantes que van ligadas a este. Negar esto,es una pataleta propia de gentes que se niegan a aceptar los mecanismos y estructuras que se dan en la Historia ¿Serán capaces de asumirlo? O lo mismo es que queremos eliminar lo que no gusta y quedarnos con lo que sí gusta, ¿esa es la adultez política que se quiere a gritos?
Si nos vamos de casa de papá y mamá nos vamos para siempre, asumiendo el riesgo, aceptando el órdago y pa´lante. Así se llega lejos. Si dejamos este modelo además hay que dejar atrás al Estado socialpaternalista y subvencionador, ese que cuida de nosotros, que lo pone todo por delante y limpia nuestras cositas sucias. Es la cruz de la cara, no existe uno sin otro. No es una parte buena y salvífica que tiene que desprenderse de la maléfica sombra. Esto no funciona así. El pack va completo. Si buscan la supresión de un modelo de Estado, han de asumir todas y cada una de las consecuencias, como los adultos que quieren ser. A menos que esto no sea más que un truculento jueguecito irresponsable de algún niño díscolo con ganas de incendiar la casa porque quiere que papá le haga más caso. Espero que no sea el caso.

27 de septiembre de 2012

Dos caminos hacia la ingobernabilidad

Benítez Rubio, Fco. Javier - Politeia - DOS CAMINO HACIA LA INGOBERNABILIDAD





APOSTILLAS FINALES.
El problema del utópico es pasarse de largo, el del realista es quedarse corto. El problema peor es que ocurran las dos cosas a la vez, como en estos tiempos. Si el realista hiciera bien su trabajo de mecánica, si arreglará de verdad las cosas, si cumpliera con su función, y ofreciera al ciudadano una buena forma de gobierno, el utópico se tendría que conformar con el salón de su casa y los perrenques en las redes sociales, y los descerebrados que van reventando cosas por las calles, alterando el orden público, quedarían evidenciados como lo que son. La casta política se ha dedicado al mercachifle, a la componenda, a la estafa masiva, ha hecho dejación de su tarea política por la comunidad en pos del negocio mafioso. Como unos se quedan cortos los otros se autolegitiman para pasarse de largo. Y como ya estamos en medio de una guerra, a ver quién de los contrincantes arriesga más en la contienda.  ¿Quién se preocupa del tercero en cuestión, de aquellos que no compran material de guerra ni de unos ni de otros? 

26 de septiembre de 2012

REFLEXIONES PATIBULARIAS 31

XXXI

NO LOS COMPRO. NO COMPRO NADA, ME HAN DEJADO SIN PAGA EXTRA. NO COMPRO EL DISCURSO DEL DESORDEN Y EL CAOS, NO SOLUCIONA NADA.  TAMPOCO COMPRABA EL OTRO PRODUCTO, EL ENGAÑO DE TODA LA VIDA. CREÍA MÁS BIEN POCO EN AQUELLO. ME PARECE, QUE SON TODOS UNOS PRODUCTOS DEFECTUOSOS. NO ME CREO LA BUENA VOLUNTAD NI LA SALVACIÓN QUE OFRECEN NINGUNO DE ELLOS. NO ME CREO NADA, NO COMPRO NADA. NOS QUEDA LA GUERRA PSICOLÓGICA DE UNOS Y OTROS.

11 de septiembre de 2012

Un largo título para una pequeña fábula de cómo una y la misma situación incide de modo distinto en la vida y el pensamiento de las personas.

Esta es la pequeña historia de dos hermanos que desde niños pasaban la mayor parte del tiempo juntos y solos en casa. Sus padres trabajaban casi todo el día y por desgracia pasaban muy poco tiempo con ellos. Había cariño y estaban arropados por los suyos, pero las cosas no iban bien y por momentos vivían entre penurias. En la calle, otros niños se reían de ellos por el simple hecho de ser pobres. Hacían chistes groseros sobre sus padres. Les insultaban, les ponían motes. No tener zapatillas deportivas de marca era un pecado muy grave en aquella parte de la calle, y se lo recordaban constantemente. El tiempo pasó, la sangre no llegó al río y los niños se convirtieron en hombres hechos y derechos, con sus estudios, sus trabajos, sus propias familias. Estas vivencias fueron conformando sus caracteres y, en parte, su pensamiento (eso que unos llaman ideologías) y así fueron diseñando sus vidas. 
Lo que uno de ellos sacó de todo aquello puede resumirse en la célebre frase de Escarlata O´Hara:  "A Dios pongo por testigo que no volveré a pasar hambre". Él decidió que trataría por todos los medios a su alcance de poner su vida en la antípoda de donde pasó su infancia. Es mejor ser rico que pobre. Hay que hacer todo lo posible por medrar y salir de hoyo, luchar para que sus hijos tuvieran lo que él no tuvo. 
Lo que el otro sacó de todo aquello puede resumirse en una cita de Montesquieu: "Una injusticia hecha al individuo es una amenaza hecha a toda la sociedad". Él decidió que pondría todos los medios a su alcance para que nadie más pasara por lo que él pasó. Había que ajustar cuentas con el rico insolidario e injusto. Hay que hacer todo lo posible para que no haya ricos ni pobres, para que no haya ricos que se aprovechen de los pobres. Luchar por un sociedad justa en la que sus hijos no pasaran por el escarnio de la desigualdad.
Ambos dos viviendo casi la misma vida. Sin embargo, ésta encaminó a cada uno  hacia un sitio distinto. O quizás no fuera la mano invisible del destino quien lo hizo sino la decisión firme de la voluntad de cada cual. No se sabe a ciencia cierta, no había nadie para hacer una foto de ese momento clave. 
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Por supuesto que no hay moraleja alguna. Cada uno que piense lo que quiera, que cada uno le ponga etiquetas a cada personaje, que cada cuál decida adjetivar las consecuencias de los actos y pensamientos de esas personas. Soy de los que entiende que una gran parte de lo que se piensa y se elige es decisión voluntaria y a conciencia y que una menor parte de lo que pensamos o hacemos con la vida que vivimos es fruto de los pequeños detalles que no dependen de nosotros, o sea del azar y de la fortuna. Soy de los que entiende que las cosas  de la vida son más cuestión de mezcla que de puridades. Por ejemplo, decidí cierto día en mi adolescencia que iba a ser del Real Madrid, decisión que mantuve con el transcurrir de los años. Las razones por las que me hice de éste y no del Barca las encuentro en que el Madrid era un equipo ganador, de brillante palmarés y que jugaba muy bien al fútbol. Metía mucho goles y perdía muy pocos partidos. Apostar a caballo ganador es una tabla de salvación mental  fabulosa en esa edad. Aquello que apoyas te llenará de ilusiones y cosas positivas, de victorias que te harán sentir bien. No descarto, ni mucho menos, que otra razón tuvo que ser una cierta rebeldía antipaterna, ya que mi padre siempre ha sido muy culé y hablaba maravillas de aquel Barca de Cruyff. En esa tierna, y difícil, época, lo mismo que quieres a tu padre le mandarías a tomar fanta por pesado (y el hombre 'sólo' hacía su 'trabajo', por el que estoy eternamente agradecido). Cierta pose rebelde me empujaba a ser algo distinto a lo que él era. Pero también recuerdo un detalle, tal vez insignificante, tal vez importante, no tengo una máquina para medir esas cosas, que ocurrió mucho antes en mi infancia. Un tío me regaló una equipación completa del Madrid, con el número 8 creo recordar (mi madre se acuerda seguro). Y vestido de blanco completo me veía tan bien, tan fulgurante, tan cómodo, tan especial y radiante, que no quería ser de otro equipo que no fuera del Madrid, porque aquello me hacía sentirme fantástico.
¿Qué es lo que nos mueve? ¿Porqué elegimos lo que elegimos? ¿Qué es lo que hace que nos hagamos de una cosa o de otra, que nos decantemos por un tipo de vida u otro? Hay una mezcla curiosa e infinita de decisiones racionales, pasionales y casualidades de la vida, (casi) todas comprensibles si hacemos caso a Protágoras: "El hombre es la medida de todas las cosas". No somos puros, somos una mezcla de muchos elementos. Tan humana es la razón como la sinrazón, a los humanos nos afectan tanto las casualidades  del azar como las cosas premeditadas, estamos en el centro y todo lo que nos ocurre, aunque sea a uno sólo de nosotros, ya es humano, algo normal y posible. Lo extraordinario es no darse cuenta de esto, me parece. No hay nada anómalo en ser de uno u otro equipo, en pensar en uno mismo como de una u otra ideología. Lo anómalo es negar las razones y los sentimientos de los demás cuando no se distinguen mucho de los propios.

8 de septiembre de 2012

Reflexiones patibularias 30

XXX

Ocurre algo muy grave, que crea gran alarma social y nos dicen: "No se puede lesgislar en caliente", "La justicia debe ser fría y no vengativa". Bueno, pasa el tiempo, ya se nos pasó el calentón. Y te dicen: "Ahora eso no toca, no entra en la agenda política", " Hay que arreglar lo de la economía". Sí lo se, ya me dí cuenta, los políticos cobran un plus por cobardía.

2 de septiembre de 2012

Reflexiones patibularias 29

XXIX

Mentiras exactas y verdades inexactas. Hubo un momento en la Historia de la Humanidad en el que se decidió por la exactitud en vez de la verdad. O peor incluso, nos hicieron ver que la segunda sólo era posible si estaba la primera. Es el tao de las ciencias, el camino de la racionalidad iluminista e ilustrada. ¿Qué es lo que digo yo? Que...
... hay verdad en un beso y en el diálogo con un amigo tomando cervezas.
... hay verdad en el dribbling de Messi y en el 'David' de Miguel Ángel.
... hay verdad en los atardeceres y en el sufrimiento de la gente.
... hay verdad, también, en el odio, la manipulación y la locura.
... hay verdad en la oración sincera y profunda y en una risotada estridente.
... y hay mucha verdad en el amor a los hijos y en un orgasmo furtivo.

Eso sí, exactitudes, precisión, no me pidan muchas. 

1 de septiembre de 2012

LUGARES SAGRADOS

Un proyecto que comencé hace mucho tiempo, que ha estado aparcado un puñado de años. Por fin me decidí, era hora de terminarlo. En formato pdf y avi con música.


Benítez Rubio, Fco. Javier - Lugares Sagrados





http://www.sacredsites.com/


27 de agosto de 2012

¿En qué clase de realidad creemos que vivimos?




Esto pasó de verdad... lo vimos todos... fuera un ataque terrorista o una conspiración, lo que está claro es aquello se cayó, las Torres se vinieron abajo y el mundo cambió para siempre. Si lo hubiéramos visto en una película diríamos que los americanos eran muy exagerados.

'Juego de patriotas' es del año 1992. Es una película de espionaje, con actor estrella, basada en una novela de éxito. En una de las escenas clave del film descubren la localización del campamento de los terroristas irlandeses. Allí en medio del desierto del Sahara, en un campamento de casetas de lona, un satélite comienza a hacer un zoom hasta llegar a casi un primer plano del escote de una de  las terroristas. La lógica es, ¿una mujer con escote en un país islámico? Al final aciertan y aquel era el campamento de los malos. Todavía recuerdo que alguien me dijo aquel día viendo la película que menudo rollazo, que eso no podía ser cierto, que estaba cogido por los pelos, que aquello era una mentira de la película y que no era posible.
No muchos tiempo después tenemos esto en los ordenadores de casa...


[Mi barrio... puedo ver hasta el patio de mi casa...]

¡¡¡ Imagínate lo que puede hacer un programa con buena resolución¡¡¡

Hay muchas cosas que ocurren en la realidad que vivimos y que aun pasando de verdad nos parece mentira, o una exageración. Nos cuesta deshacernos de cierta ingenuidad infantil de querer vivir en un mundo manejable, donde no existen ni monstruos ni sucesos monstruosos. Parece que queremos vivir en un mundo de mentira en el que veamos en el cine y la televisión, de modo controlado, las cosas raras y duras. Y no es cierto. El mundo, por desgracia está lleno de monstruos que hacen cosas monstruosas. Ya pasó el tiempo de seguir manteniendo aquella escusa, tan socorrida, de esas cosas solo pasan en América. Los americanos, ellos sí que son los raros, los violentos, los locos. Los casos de Sandra Palo, Marta del Castillo, y los Niños de Córdoba, nos dicen que aquí en nuestro país de pandereta y 'güena jente' ya hay personas muy chungas haciendo el cafre. Y no es un capítulo de CSI, NCIS, Mentes Criminales o algo así; es en el programa matutino de la Quintana y la Griso. Y es un Pepito Perez de la vida el que ha realizado tan dantescos hechos.
'Citizen X' es del año 1994. Por cierto, aquella la vi con mi amigo Dani y nos gustó mucho. Está basada en sucesos que ocurrieron realmente en los años 70 si mal no recuerdo. Resulta que en la Rusia todavía comunista, un policía se pega años investigando un montón de muertes de características similares. El hombre sabía que aquello era cosa de un asesino en serie, de un psicópata que iba cargándose a un tipo similar de personas. Le pusieron todo tipo de trabas en el caso porque en la Gran Madre Rusia, garante del comunismo del pueblo, esas cosas no pasaban. Los enfermos mentales asesinos y criminales eran como la Coca Cola y el Burger King, una cosa de occidentales, de los capitalistas y su mundo enfermizo. ¡Toma, argumento!
Que no nos pase como aquellos idiotas. Hay que madurar y hacerse mayores, aprender a vivir con nuestros miedos. Sigue valiendo el viejo adagio: Prevenir antes que curar. Hemos de hacernos cargo de nuestros propios fantasmas, de que entre nosotros hay gente capaz de hacer cosas malas y dañinas. No se trata tampoco de irse al otro extremo y que cunda el pánico. Por eso es tan difícil, porque hay que buscar el punto intermedio. Y de ese nunca hacen películas ni series.



25 de agosto de 2012

Reflexiones patibularias 28

XXVIII

Lo que Dios haya unido en la Tierra, ningún hombre lo separe. Hemos cambiado de ciclo, vivimos una nueva época, un nuevo tiempo. Lo que el hombre haya destrozado en la Tierra, ningún Dios ni Fuerza lo arregle. 

23 de agosto de 2012

Reflexiones patibularias 27

XXVII


El destino... ¡ese gran hijo de la gran puta!... 
Frank Lapidus

Hay gente que no lo ha visto nunca en su vida y piensa que es imposible que pueda pasar por la vida de los demás. Hay gente que lo ha visto pasar por delante suya y piensa que por narices tiene también que pasarle a todos los demás. Hay un problema ahí de trasponer a todos los demás lo que nos pasa o no nos pasa en la vida. Cada uno a lo suyo, por favor. Gracias. 

22 de agosto de 2012

Reflexiones patibularias 26

XXVI

Hoy en día lo revolucionario está en no ser revolucionario. Lo distintivo está, realmente, en no ser y hacer las cosas como los demás. Porque la fuerza, el rompe y rasga, la indignación, la erística, se ha convertido en el modus viviendi de tantos y tantos. Es más, hay toda una competición para ver quién es el que es capaz de hacer la cosa más grosera, más gorda, más insultante, más montaraz; para que la tempestad llegue a los corazones de sus seguidores y termine ardiendo Troya, cueste lo que cueste, porque lo importante es estar indignado y ajustar cuentas, y no solucionar las cosas que nos pasan. Lo nuevo y minoritario, está ahora en no querer que arda todo, en no pensar que la violencia y el caos sean la solución. En la mensura, en el sentido común, en la prudencia, en el primero oir y escuchar para luego opinar, en el estudiar antes de lanzarse a sentar cátedra, en decir las cosas bien dichas sin destemplanza o falta de educación. Llegará el momento en que haya que dejar de destruir y habrá que comenzar a reconstruir.

21 de agosto de 2012

Reflexiones patibularias 25

XXV

La esperanza es un material muy delicado que ha de ser manejado con mucha precaución y equilibrio. Tan malo es vivir la vida en un agujero negro sin ningún atisbo de ella como manejarla sin límites ni sustento material previo y terminar habitando por siempre en la vida de un niño.

20 de agosto de 2012

Reflexiones patibularias 24

XXIV

No vas a cambiar el pasado. Aprende para cuando te encuentres en otra similar y así hacer mejor las cosas o equivocarte menos. El pasado es el banco de pruebas del futuro.

18 de agosto de 2012

Reflexiones patibularias 23

XXIII

El mejor en lo suyo, con un espíritu competitivo sin parangón. Una gozada verlo de jugar.

Para los de mi quinta el 23 es Michael Jordan.


17 de agosto de 2012

Reflexiones patibularias 22

XXII

Estoy de acuerdo con el maestro, no es cuestión de felicidad sino de serenidad, equilibrio y armonía. Y como no seré capaz de expresarlo mejor aquí quedan dichas sus palabras:

- "La felicidad es sólo una invención para hacer la vida más soportable".

- "A mí no me gusta hablar de felicidad, sino de armonía: vivir en armonía con nuestra propia conciencia, con nuestro entorno, con la persona que se quiere, con los amigos. La armonía es compatible con la indinación y la lucha; la felicidad no, la felicidad es egoista".

- "La serenidad tiene mucho de aceptación, pero también algo de autoreeconocimiento de tus límites. Vivir en armonía no significa que no tengas conflictos sino que puedas convivir con ellos con serenidad".

José Saramago

En sus palabras.
Editorial Alfaguara, 2010 Madrid
(páginas 38,48 y 53)

16 de agosto de 2012

Reflexiones patibularias 21

XXI

¿Existe la Justicia cósmica o divina, esa que muy de vez en cuando pega un fogonazo y pone las cosas en su sitio? ¡Cuánta falta nos haría algunas veces! Para que paguen los malutos y criminales todos, y los inocentes descansen en paz. 



15 de agosto de 2012

Reflexiones patibularias 20

XX

Hay batallas que se pierden injustamente.  Y es que la guerra no entiende de justicias. La guerra convierte a los niños en adultos y saca las verdades de los recónditos y más oscuros pozos del alma. Pero más allá de todo eso, la guerra no entiende de tribunales ni de legislaciones, solo de maquinación, hechos consumados y de fuerza. Esas derrotas injustas quedan grabadas en las mentes y en los corazones de los derrotados y de toda su progenie futura. Con el tiempo, la batalla reaparecerá. Las heridas, en el futuro, volverán a abrirse y por la búsqueda de la justicia del pasado se romperá la justicia de ese presente. 
Nos pasamos todo el siglo XX viviendo en esto. Ahora, con la batalla de la crisis económica y la injusticia que se está cometiendo contra la ciudadanía vuelven a repetirse las cosas que conocemos. Cuando mis hijos sean mayores recordarán lo que vivieron en su infancia, el temor en los rostros de sus mayores por ejemplo. Y la guerra seguirá. Pero puede que algún día, llegue el día en el que pierdan los que siempre ganan y más de uno podrá respirar tranquilo, aunque sea en su tumba. Eso esperamos.

14 de agosto de 2012

Reflexiones patibularias 19

XIX

La culpa, ¿cuántos millones de acciones han sido llevadas a cabo bajo su funesto influjo? Aquí tenemos otro de los grandes motores del ser humano, con la misma jerarquía que la mentira, el miedo, el secreto, el sufrimiento, la soberbia o el orgullo.

13 de agosto de 2012

Reflexiones patibularias 18

XVIII

Educar e instruir no son la misma cosa, están relacionadas pero no son lo mismo. Instruir tiene que ver con la transmisión de datos y conocimientos. Educar tiene que ver con la inculcación de valores e ideas. 
La escuela es el lugar donde se instruye. La familia es el lugar donde se educa. Y ojo, no he escrito en ninguna de la frases anteriores la palabra únicamente. En la escuela también se educa y en la familia también se instruye. Pero cada una tiene una función preferente. Grandes problemas aparecen si la escuela es la única que educa y si la familia es la que tuviera que instruir a los niños y niñas. 
La instrucción es previa a la educación, la transmisión a la inculcación. Si uno no tiene datos ni conocimientos de la realidad no podrá reflexionar sobre el mundo en el que habita y sacar conclusiones del mismo. Y si no hay reflexión ni ideas elaboradas no es posible dar valor a las cosas y pensar qué es más importante y deseable.
Grandes problemas aparecen si queremos inculcar los conocimientos. Si esto ocurre, se ideologiza la escuela hacia un lado u otro, hacia un color u otro. La escuela pierde su razón de ser ya que no enseña sino que lava el cerebro de los niños a favor de alguien. 
Grandes problemas aparecen si queremos transmitir los valores. Si esto ocurre, la calidad de la enseñanza se cae por los suelos y los niños no sabrán nada de la realidad física y cultural en la que viven. Un sociedad de burros es muy fácil de manejar.
En los tiempos que corren, las ideologías, aunque agónicas, siguen peleando entre ellas convirtiendo los colegios, las escuelas y los libros de textos en auténticas máquinas de lavar cerebros. Y es así, en parte, porque una gran cantidad de padres han hecho dejación de su responsabilidad al dejar en manos del Estado no solo la instrucción sino la educación de sus hijos.