28 de marzo de 2012

Mi postura...

Me gustaría no tener que vivir en un mundo de blanco y negro, de rojos contra azules, de flores contra pájaros. 
Quisiera que no fuera un mundo de extremos, de víctimas y verdugos. Un mundo en el que dos sordos se dicen, mutuamente, 'yo soy el bueno' y 'tu eres el malo'. 
Ojalá fuera un mundo con más de dos ángulos, un mundo con más de dos lados, con solo derecha e izquierda. Me gustaría un mundo donde pudieran encontrarse los contrarios para equilibrar la vida de los ciudadanos.
Estaría bien habitar en un mundo que no estuviera reducido a vencedores y vencidos, de muertos y asesinos. Un mundo en el que el otro que no piensa como tú es simple y llanamente, un enemigo. 
¡Qué no daría yo por que este mundo fuera otro mundo! Cansa vivir en un mundo de escrituras y tachones. Un mundo con dos libros de historia, una para la conveniencia de cada cual. Un mundo de revisionismo y de revisión del revisionismo. Un mundo donde la justicia de unos no sirve para los otros. Un mundo en el que un voto no vale lo mismo que otro voto, porque uno es la vida y el otro la muerte. Un mundo de reformas y contrarreformas. Un mundo donde un muerto no vale lo mismo que otro muerto. Un mundo donde el criminal de unos es el héroe de los otros, donde las hazañas de unos es el crimen de otros. Un mundo de bandos que ocultan la venganza poniéndole cara de justicia. Un mundo de gente sobrelegitimada que tiene que luchar contra gente execrable. Un mundo donde los vivos tienen que volver a pelearse por lo que hicieron los muertos. 
¡Pues no! No me gusta vivir en un mundo así, aunque no me quede otro remedio. Y siento mucho si mi neutralidad no te gusta, o no te parece bien, o me coloca a tus ojos en el lado contrario. Eres libre de escoger, tanto como yo de no escoger ni a un lado ni a otro. Eres libre de pensar, tanto como yo. No me conviertas en tu enemigo, no me odies, no trates de vengarte de mi por no ser de los tuyos. Porque ni soy de los tuyos ni soy de los otros. Porque hay huecos en el mundo para ser de muchos bandos, hay legitimidad para ser de otro modo, y pensar de otra manera. Y siento mucho que confundas mi neutralidad con la pasividad, siento que confundas mi neutralidad con falta de espíritu crítico. Estoy criticando a los dos bandos, su violencia, su posesión de la verdad, estoy criticando la doblez de vuestro mundo maniqueo de dos colores. Me resisto y me indigno, no estoy impasible ante el campo de batalla en el que se ha convertido la sociedad. Si tú escoges tu particular modo y manera de indignarte, déjame a mi escoger el mío. Es un mundo grande en el que cabemos todos.